PEPE "MITRA" EN IRAK

Jose Armijo Gonzales, coronguino, hijo de Shatu y Rómulo, ex alumno del Colegio "San Pedro" Corongo, conocido cariñosamente como “mitra” desde hace muchos años trabaja para la Cadena de Televisión CNN, a lo largo de su vida laboral se ha desplazado por los diferentes lugares de conflicto mas “calientes” del planeta, como Ecuador, Chile, México, Estados Unidos, Cuba, Haití y otros que no recuerdo bien. Ahora le ha tocado vivir y cubrir información como corresponsal de guerra en Irak, él, ha pedido mío nos hace llegar su crónica en medio del peligro y nerviosismo que produce el jugarse la vida todos los días. Aquí el artículo para conocimiento de los seguidores de Purunmarka.

DIARIO DE BAGHDAD

Cuando ceremoniosamente, fiel a su estilo mi entrañable primo Pispa me pidió que escribiera acerca de la Guerra en Iraq que estoy cubriendo, ni yo mismo alcanzaba a entenderla en su totalidad a pesar que me considero regularmente informado. No quiero entrar en diatribas ni contra Sadam ni contra Bush ni filosofar ni analizar sesudamente como lo hacen muchos periodistas que escriben cómodamente desde sus escritorios con aire acondicionado a miles de kilómetros de distancia, simplemente trataré de narrarles un viaje a Oriente Medio, al otro lado del mundo, a Iraq, cuna de la civilización.

Tres días fueron los que estuve esperando en el aeropuerto Queen Alia de Amman la desértica capital de Jordania, una persistente tormenta de arena en Baghdad nos impedía subirnos al avión que nos llevaría a nuestro destino, sin embargo al tercer día, con tormenta y todo los experimentados pilotos de Iraqui Airways logran aterrizar a ciegas en medio de una espesa y ensordecedora nube de arena que se mete hasta el lugar mas secreto de tu cuerpo. Inmediatamente la sensación de incertidumbre se apodera de mí cuando 3 personas de nuestra seguridad personal cumplen su función para la que fueron contratados, uno me pone el chaleco antibalas (unos 10 kilos encima) otro busca un casco a mi medida (difícil en mi caso pero lo consiguió) otro me da un “short briefing” que lo escucharé todos y cada uno de los días siguientes antes de salir a cubrir una noticia, me indica el nivel de peligrosidad del día, verde amarillo y rojo, hoy es rojo me dice y sin darme cuenta estamos ya corriendo a casi 200 Kilómetros por hora rumbo a la Zona Roja donde se encuentran las oficinas de CNN, que para no comprometerse, declinó alojarse en la medianamente mas segura Zona Verde a cargo de las tropas estadounidenses. El que mas se alegra al verme es Sanjiv un colega mío de origen Indú al que vengo a reemplazar, yo no lo conocía pero casi casi me levanta en hombros, por un momento llegué a dudar si era por que me veía o porque mi presencia aseguraba su salida, fue esto último por supuesto.

Todos los equipos están cubiertos de arena y a la gente parece no importarle mucho, hay que soplar el teclado para ver bien las letras en la computadora. La diferencia horaria hace que no duerna ni un segundo y en mi cama toda mi vida se me pasa por la cabeza, no puedes encender las luces (cuando la tienes) trato de acordarme la ruta al “cuarto seguro” que me enseñaron, adonde tendría que llegar 15 segundos después de que suene la alarma por los morteros o cohetes que están cayendo frecuentemente por esta zona, primer día, no confío en mí, seguro que iré en sentido contrario conociéndome lo despistado que soy.

Segundo día en Baghdad (que es un solo día de 48 horas para mí pues no he dormido) parece Lima pero no es neblina es arena, la tormenta aun no pasa pero tenemos que ir a una cárcel en Sadr City cerca de aquí pero nos demoramos 4 horas de ida y 4 de vuelta por la cantidad de controles y precauciones que toma el ejército de Estados Unidos con los que estamos yendo, en medio de un calor insoportable para mis colegas y los soldados pero que para mí es primavera comparado con el calor de la lejana Cuba donde vivo.

En varios retenes cercanos a edificios administrativos de Estados Unidos caras conocidas, metidos en un camuflado uniforme que parece les quedara grande y muy bien armados nos revisan escrupulosa y descortésmente unos guardias que al ver mi pasaporte se inundan de alegría, son unos de los 1,800 peruanos contratados para custodiar y realizar este tipo de tareas rutinarias y tediosas, uno de ellos quiere asegurarse y muy criollazo me pide repetir muy rápido 5 platos típicos del Perú (aparte del archiconocido cebiche), entonces ahí voy yo en voz alta militaresca: chanfainita, cau cau, tacu tacu, caldito de gallina y Tacacho con cecina, la risa se contagia en todo el batallón, pobres, algunos de ellos ya llevan 2 años sin ver a su familia. Mas allá, otro retén, un guardia de origen Ugandés que no es moreno, sino casi tirando para morado al ver mi rojito (pasaporte) me dice que es de Chincha y que soy su familia, clásico de los peruanos digo, seguramente le toman el pelo todos los días.

Ya en la cárcel, Drama por todos lados, donde dirijas tu mirada, mujeres cubiertas de velo negro nos insultan?, toda la gente nos mira con desconfianza, solo los niños nos sonríen con el pulgar en alto y también muy alto el agudo coro que sale de los parlantes de las mezquitas que rodean esta cuidad alabando a Ala, Mahoma y todos sus mártires, se respira un intenso aire religioso, profundamente místico, todo esta en función del Coran, la Biblia de los musulmanes, las mujeres esquivan las miradas, por naturaleza busco aunque sea sus pantorrillas algo de ellas pero me da terror y yo también las esquivo, no vaya ser que está prohibido y esté profanando algo y termine mis días apedreado en medio de este barrio.

Se siente miedo a morir, aunque mas miedo he sentido en la culebrilla rumbo a Corongo, pero miedo al fin. En la cárcel una mujer grita y llora en arabic que por lo menos en esta vida no lo aprenderé jamás y nadie de nosotros entiende nada pero de lo único que estamos seguros todos es que está muy enojada con alguna autoridad en esta ciudad ingobernable que se ha convertido Baghdad. En medio de todo esto un soldado americano se me acerca y me pregunta “What she says?” La única zona descubierta de mi cara entre la nariz y la boca, le había hecho pensar (y por mi color seguro) que yo era Iraquí, ante mi desconcierto las carcajadas de soldados americanos en su mayoría adolescentes hacen que la mujer que se queja y grita se quede en silencio.

Pero dejen que les explique: Cuando los Estados Unidos invadieron Iraq 5 años atrás en el 2003, la etnia que apoyaba a Sadam Hussein era la Suní, entonces ellos juraron venganza a Estados Unidos y comenzaron a reclutar gente de Al Qaeda el grupo enemigo mortal del mundo occidental y todos los infieles (religiosamente hablando oe) y comenzaron a atacar a las tropas estadounidenses causándoles innumerables bajas. La etnia Chiíta que apoyó en un principio la invasión luego se dividió en varios grupos insurgentes uno de ellos dirigido por el temido líder religioso Muqtada al Sadr que rechazan la ocupación como tal y como son históricamente apoyados por Irán también comenzaron a atacar a las tropas invasoras principalmente con ataques suicidas de coches bomba.

A esto hay que sumarle una ola incontrolable de secuestros de ciudadanos extranjeros destinados a presionar la retirada de Estados Unidos la cosa se vuelve caótica. Además, al imponer unas elecciones al estilo occidental los Estados Unidos tuvieron su propio caballo de Troya, pues salió elegido Nuri Al Malik un primer ministro de la etnia Chiíta. Entonces ahora las fuerzas de la “coalición” llámese Estados Unidos co-gobierna un país con el enemigo o los Iraquies co-gobiernan con el enemigo depende como se le vea (repito los Chiítas son apoyados por Irán, enemigo de Estados Unidos) todo es desconfianza y es todos contra todos y en realidad los Estados Unidos están en el medio sin poder hacer mucho y ya van 4,057 los soldados americanos que mueren al día de hoy y mas de 45,000 los iraquíes en su mayoría civiles aunque algunos estudios hablan de hasta 85,000 muertes.

Sin embargo la convicción de ambos grupos es palpable a simple vista, los grupos insurgentes con sus ataques suicidas y efectivos y los americanos que rodeados de Burguer King, McDonalds y Pizza Hut y sus aires acondicionados a todo motor en la Zona Verde también aseguran que “hay avances”. En lo personal, de verdad no me gustaría ver a Estados Unidos humillados evacuando Baghdad un día, pero si me preguntan, lo mejor seria que se retiraran, aunque eso signifique lo mismo que perder.

De regreso a nuestras oficinas, estoy empeñado en aprender algo de Arabic, los números por lo menos, el Cero es un punto, el 5 es como el Cero, el 3 es como el 7 nuestro y el Siete al revés… bueno hasta ahí llego, poco a poco. Como periodista me he ufanado siempre se ser de mente amplia, respetuoso de las culturas de todo el orbe, de las costumbres, de las etnias y de todo lo que implique diversidad, pero no sé por que en estos días he estado dando gracias a San Pedro por haberme permitido nacer en donde nací, por haberme criado de la forma en que me criaron y por creer en lo que creo, lo mío es el mundo occidental y en estos casos es cuando uno agradece lo que la vida nos da día a día. Estoy terminando estas líneas, tirado en el piso de barriga que por regla uno hace cuando se produce un apagón como el que hace 5 minutos se produjo, contando en regresivo los 46 días que aun me quedan en esta tierra donde nació la civilización.

Baghdad, Mayo 17 de 2008
1:54 AM

Jose Armijo


Y aquí para acompañar la lectura con un tema iraquí.

boomp3.com


Con el permiso del autor del artículo, dejo este vídeo que en realidad hasta hoy era privado, mediante el cual Pepe le cuenta a Diego (su hijo) el desarrollo de las acciones bélicas en esa parte del mundo.

Post a Comment

2 Comments

  1. Pepe:
    Excelentes artículos que ya nos tienes acostumbrado. Esta vez si no quisiera estar en tu pellejo porque ser periodista en medio de una guerra santa y a la vez nada santa es muy riesgoso. Cuídate primo

    Gilbert Collazos

    ReplyDelete
  2. me parece muy interesante lo que haz escrito, es una experiencia que jamás olvidaras;por todo lo comentado quiero decirte que te cuides mucho y que vuelvas pronto a nuestra patria o a tú Cuba querida.
    Besos tú prima.
    Gabriela Cárdenas.

    ReplyDelete